Deterioro en maderas por la rayos UV

Los climas severos, los bruscos cambios de temperaturas y la radicación solar, conforman una trilogía que actúa en forma progresiva y destructiva sobre los materiales de la construcción pero especialmente sobre las maderas sin protección.

Si bien no solo éstas son las influencias directas, también pueden mencionarse los mecanismos de deterioro biológico que participan activamente durante los procesos de polución y agravan aún más, el estado de deterioro de las maderas en el exterior.

El sol es, sin dudas, el peor enemigo de la madera en exteriores y de la madera en la construcción, ya que la mayoría de los trabajos realizados con este material, están expuestos a su acción directa, las radiaciones emitidas por el sol, son:

► UV- Ultravioleta.
► IR- Infrarroja.

Estas dos radiaciones son las que más afectan a las piezas de madera sin importar su especie, además actúan conjuntamente, pero su efecto es muy diferente.

Radiación UV – Ultravioleta

Esta radiación quema las células de la superficie de la madera sin aumentos considerables de la temperatura de contacto. El efecto que produce es un agrisamiento y descamado de la madera, más acentuado en las maderas rojas como la teca, por ejemplo.

Radiación IR- Infrarroja

Al contrario que la anterior, esta radiación calienta la superficie de la madera, pero sin quemarla. Produce la evaporación del agua contenida en las células de la superficie originando tensiones en el interior de la madera que producen fisuras, grietas, combinadas con alabeos.

En la actualidad una fórmula para proteger la madera de los efectos de la radiación ultravioleta consiste en la aplicación de un pigmento resistente a la radiación (generalmente un óxido mineral) que actúa como superficie reflectante.

En zonas de altas temperaturas, las superficies oscuras (buenas para reflectar los rayos ultravioletas) absorben la radiación infrarroja y por tanto calientan demasiado la superficie de la madera. Si esta madera es muy resinosa, puede dar lugar a problemas de exudación de resina perjudicando la aplicación de revestimientos y pinturas, por lo cual deben eliminarse superficialmente antes de su aplicación.

La madera sufre una foto-degradación o foto-oxidación, causada por la radiación UV, provocando una alteración de las propiedades y del color original . Colorín ha desarrollado un Barniz Marino con Doble Filtro Solar que no solo absorbe los rayos UV sino atenua la acción de la radicación infrarroja evitando una prematura pérdida de brillo, cambios de color, descascarado, cuarteo y amarilleo.
Su fórmula exclusiva emplea un sistema de barrera, un escudo de protección por medio del empleo de poderosos Filtros Solares que garantizan la calidad y la protección por muchos años de sus maderas más preciadas.

Obteniendo Soluciones

Las maderas sin protección en exteriores sufren la degradación por medio de la acción de los agentes externos. La superficie se agrisa, se deteriora y pierde su belleza y apariencia natural.

Emplear métodos preventivos de protección es la solución, sumado a frecuentes períodos de mantenimiento. Sin embargo, es importante lograr la recuperación de maderas deterioradas y obtener una protección eficaz.

Revisar la integridad de la superficie y aplicar un lavado con agua caliente por medio de una hidrolavadora a baja presión. Emplear una solución de Sal de Limón a 30/35º de temperatura preferentemente, para activar su acción, aplicada con un cepillo semiduro de paja, pita o plástico, dejando actuar 30 minutos. Se observará que el color de la superficie se irá aclarando y mejorando paulatinamente. Repetir la operación.

Puede emplearse también el arenado a muy baja presión, lo cual recuperará por completo el color original, restableciendo su calidad y aspecto natural.

Para estos métodos emplear maderas de mediana densidad y dureza en adelante. En maderas blandas este método puede generar daños irrecuperables, especialmente si el deterioro de los agentes externos son profundos.

Si se presentan emisiones de resinas naturales es recomendable el empleo de Hydrarrás, Hydrasol o alcohol industrial por frote enérgico e intenso, hasta su eliminación superficial.

La protección UV se logra a través de productos de alta calidad, pero principalmente los que hayan previsto en su fórmula filtros dobles de acción simultánea e inmediata.

Aplicar una primera mano 1:1 de Madecor Barniz Marino Doble Filtro solar mezclado con Hydrarrás como mano de anclaje. Su alto nivel de penetración, favorecida por la acción de los solventes, garantizan la adherencia del producto y su alta performance en el futuro.

Para finalizar, deben aplicarse 3 manos adicionales con intervalos de 8 a 12 horas, lijando cada vez para obtener acabados profesionales. Madecor Barniz Marino Doble Filtro Solar una solución definitiva al ataque de la radicación solar UV y a las inclemencias del tiempo en los ambientes más hostiles.